II parte de «Almuerzo en lo alto de un rascacielos«
Veíamos en la primera parte de este artículo la famosa fotografía tomada en lo alto de un rascacielos de Nueva York el 20 de septiembre de 1932, titulada: «Lunch atop a Skyscraper«, del fotógrafo Charles C. Ebbets. En ella aparecen once trabajadores, la mayoría emigrantes europeos y algunos indios americanos, que desafían la enorme altura (260 metros sobre la calle) mientras descansan del duro trabajo y del riesgo que suponía realizar su labor sin las más mínimas medidas de seguridad.
Aún así, parece que la fotografía no fue espontánea y que estuvo preparada previamente por los fotógrafos que realizaron el reportaje con el fin de promocionar el edificio Rockefeller Center mientras lo estaban construyendo. Como podemos apreciar en las imágenes debajo de estas líneas, en otras fotografías tomadas el mismo día, aparecen algunos trabajadores lanzando una pelota de fútbol, fingiendo dormir sobre la viga de hierro y saludando con la gorra en la mano.
Versiones y parodias de la famosa fotografía
Fotógrafos y trabajadores
Además del autor de la fotografía, Charles C. Ebbets, fueron otros dos profesionales los que estuvieron en el edificio Rockefeller Center esos días, William Lefwich y Thomas Kelley, que pueden ser los que aparecen en estas fotografías desafiando al inmenso peligro que supone cargar con el pesado equipo fotográfico en unas condiciones tan precarias.
Pero no todo es cierto en la fotografía, la verdad es que uno de los pisos terminados del edificio se encontraba a unos pocos metros por debajo de los trabajadores suspendidos sobre la viga. Fue una de las muchas fotografías tomadas y distribuidas a los medios de comunicación para promover los bienes raíces de la Depresión, tras el famoso «Crac del 29», aunque «los fotógrafos estaban absolutamente locos», como manifestó la archivista del Rockefeller Center, Christine Roussel.
Para estos fotógrafos el riesgo era por uno o varios días pero para los trabajadores que construyeron los famosos rascacielos de Nueva York, las condiciones eran a diario. Las medidas de seguridad sencillamente no existían, tenían que vencer el vértigo que supone estar a casi 300 metros de altura y trabajar en esas condiciones.
La presencia de estos hombres en la fotografía es la síntesis de una época. Tras el «Crac del 29» había muy poco trabajo y, sobre todo, para los emigrantes, en su mayoría europeos que llegaron al Nuevo Mundo en busca de una nueva vida que en el «Viejo Continente» no tenían, asolado por las continuas guerras. Como muy bien manifestó John Rasenberger, autor de «High Steel: Los hombres atrevidos que construyeron el horizonte más grande del mundo«, en este documental se dice: «La paga era buena. La cosa era que tenías que estar dispuesto a morir«.
Un trabajador vizcaíno sobre la viga
Hace unos días recibimos la llamada de un escritor bilbaíno (prefiere no ser citado), manifestándonos que hace unos 10 años había recopilado información sobre algunos trabajadores que aparecen en la viga al estar relacionados con la tierra vizcaína. Como sucede en la mayoría de los casos, la información le llegó por medio de un familiar de uno de los obreros que posan en la viga.
Con esa información y otra que pudo recabar por sus propios medios elaboró un artículo que fue presentado en el periódico Bilbao y también en El Correo, aunque ninguno de los dos medios consideró oportuna su publicación.
Dado que ninguno de los dos rotativos quiso hacerse eco de la noticia que les brindaron tan amablemente y ante el riesgo de que este documento quedara en el olvido, el escritor contactó con nosotros para facilitarnos el dossier con toda la información y las fotografías correspondientes.
La próxima semana desvelaremos el misterio de la identidad de este vizcaíno que, con toda seguridad, se encuentra en la viga del Rockefeller Center.
Permanecer atentos a nuestras publicaciones para no perderos el desenlace de esta interesante y emotiva historia de cómo un vizcaíno llegó a posar en la que puede ser la más icónica fotografía de la Historia.
Estos son los artículos publicados hasta la fecha…
Almuerzo en lo alto de un rascacielos
Los que construyeron los rascacielos de Nueva York
Dani Ibargüen (Peter, el vasco) visita a su familia
Y Dani nos dijo: «El de la foto es mi padre»
Nacho Ibargüen. Documentos y fotos
RNE se hace eco de nuestras investigaciones sobre Nacho Ibargüen