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Músicos de Valmaseda (3ª parte)

Creación de la Banda de Música de Valmaseda (1882)

En la última sesión del año 1881 se decidió el ayuntamiento a formar una banda de música bajo la dirección del maestro Leguineche, pero no todos los concejales estuvieron de acuerdo pues en la siguiente sesión uno de ellos expuso su punto de vista ya que no estaba muy acorde con la legalidad.

El concejal Gabino Acebal no estuvo conforme con el acuerdo anterior sobre José Ventura Leguineche como organista y director de la Academia de Música, puesto que pensaba que era obligación del Culto el sostenimiento del organista y que para retribuirle con mayor sueldo como director de Música y Academia se debía anunciar la plaza vacante.

Ayuntamiento de Valmaseda. Sesión del 5 de enero de 1882

Esta medida trajo serios problemas posteriores a José de Leguineche como veremos en su momento.

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El Reglamento y el resto de instrumentos

Por fin se acordó formar la banda de música municipal y crear un reglamento que delimitara sus funciones y obligaciones que, por el momento, no he conseguido encontrarlo.

Las familias valmasedanas pudientes se involucraron en el proyecto y, con el fin de que se llevara a cabo, aportaron diversos instrumentos.

Los herederos de Francisco de Arteche regalaron cuatro clarinetes nuevos para la creación de la banda de música y el ayuntamiento agradeció el gesto.

Ayuntamiento de Valmaseda. Sesión del 12 de enero de 1882

A finales del mes de enero de 1882 ya estaba redactado el Reglamento de la Banda de Música de Valmaseda.

Se leyó el Reglamento para la Academia de Música y la Banda Municipal y se aprobó.

Varios jóvenes de la villa solicitaron el ingreso en la academia y les fue concedido.

Ayuntamiento de Valmaseda. Sesión del 28 de enero de 1882

Con esta medida ya estaba en marcha la formación de la banda y, además, varios jóvenes de la villa solicitaron participar en ella y en los meses posteriores fueron más los interesados: Idar Abarrategui, Leima Achúcarro, Pedro Bermejillo, Saturnino Armendáriz, Sotero Tejera, Félix Martínez, Santiago Fernández, Emilio Villa, Juan Onaniel, Esteban Ruiz, Luis San Cristóbal, Blas Ibargüen y Anselmo Brunt, entre otros (algunos nombres son lo más aproximado que he podido deducir porque las actas están escritas a mano y no siempre resultan legibles).

Otro valmasedano ilustre que quiso participar en este interesante proyecto fue el hermano del arquitecto Félix de la Torre.

Silverio de la Torre regaló a la banda de música municipal un barítono, bombo y platillos. El ayuntamiento agradeció el gesto.

Ayuntamiento de Valmaseda. Sesión del 1 de abril de 1882

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Primera actuación pública

Finalmente, después de disponer de los instrumentos cedidos por las personas pudientes y comenzar los ensayos, la banda estaba lista para debutar en la villa y lo hizo asumiendo un gran compromiso, acompañar a las procesiones de la Semana Santa de 1882, celebrada los días 7 y 8 de abril (Jueves y Viernes Santo). El mismo día de Viernes Santo se celebró una sesión en el ayuntamiento de Valmaseda para felicitar a los músicos y darles una gratificación.

La Banda de Música Municipal se inauguró en las funciones de la Semana Santa y por tanto se les dio una gratificación de 40 ptas.

Ayuntamiento de Valmaseda. Sesión del 8 de abril de 1882

Inmediatamente después de este debut, el director de la banda reclamó el pago de su labor como organista de la iglesia de San Juan del Moral.

José Ventura Leguineche reclama las mensualidades como organista de San Juan desde 1º de enero. El ayuntamiento le comunica que desde el nuevo arreglo parroquial ese cargo depende de la Fábrica de esa iglesia.

Ayuntamiento de Valmaseda. Sesión del 13 de abril de 1882

Como he indicado anteriormente, el arreglo relacionado con la Ley de Culto y Clero ocasionó que Leguineche no cobrara por su labor desempeñada durante los 11 años anteriores, al ser el encargado de pagarlo el mayordomo de la Fábrica de la Iglesia de San Juan, una especie de «gerente» que se encargaba de la contabilidad del templo.

Iglesia de San Severino en el siglo XIX, durante una celebración

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Problemas económicos

Esta medida debió contrariar al director de la banda que dejó desatendida la formación musical de sus alumnos, hasta el punto de que algunos abandonaron la banda. Mientras tanto, los vecinos se mostraban agradecidos con la Banda de Música y los rematantes (personas que adquirían los derechos de explotación en los distintos gremios por una cantidad o remate anual), destinaron una cantidad para la banda.

Juan Vergara e hijo y Gabino González reclama la parte correspondiente de haber formado parte de la Banda de Música Municipal, dado que la separación de estos miembros no fue motivada por causa legítima, sino por voluntad propia. No se aceptó la reclamación.

Algunos rematantes pujaron 125 ptas. para la banda de música municipal. El ayuntamiento consideró que se compraran unas boinas con el distintivo de una lira.

Ayuntamiento de Valmaseda. Sesión del 5 de mayo de 1882
Músicos de Valmaseda tocados con la boina con el distintivo de una lira

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Respecto a la familia Vergara e hijo (o López de Vergara) hablaremos en el próximo capítulo dada su participación en la continuidad de la Banda de Música Municipal de Valmaseda.

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Hasta aquí he citado las noticias encontradas en el Archivo Histórico Municipal de Valmaseda relativas a la música en la villa, finalizando el relato con la formación de una banda de música municipal, cuya continuidad será tratada en el próximo capítulo de esta serie.

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